Si te propones formar un ahorro, es probable que lo consigas. Se sabe que reservar una parte de tus ingresos para situaciones de emergencia, como accidentes o enfermedades, es una forma de evitar endeudarse por la falta de dinero. No obstante, hay gente que no encuentra un método adecuado para comenzar a ahorrar, que luego puedan convertir en ahorros formales, incluso depositando en una cuenta bancaria.
Estos instrumentos dan la oportunidad de generar rendimientos a partir de los fondos que has ahorrado. Sin embargo, si no tienes suficiente dinero para invertir, puedes comenzar con una alcancía que se convierta en una forma de acumular los recursos necesarios. ¿En qué consiste el reto de las 30 semanas? Así puedes ahorrar 18 mil pesos.
Si en algún momento trataste de llenar una alcancía y no lograste alcanzar tu objetivo, no debes desanimarte. Este desafío está diseñado estratégicamente para conseguir la tarea de recolectar esa cantidad en aportes más pequeños. Por esta razón, seguir meticulosamente este esquema de pagos es todo lo que necesitarás para tener éxito.
Para que te sea más fácil, puedes hacer una tabla transcrita o impresa, de manera que puedas consultarla cada semana antes de realizar tu aporte. De este modo, sabrás exactamente la cantidad que debes depositar en tu alcancía.
Desde el primer pago de tan sólo $500 hasta el último aporte de $445 pesos, podrás no exclusivamente alcanzar la cifra deseada para tener estabilidad financiera frente a cualquier situación imprevista, sino que también desarrollarás un hábito financiero que podrás seguir fortaleciendo en el futuro.