Cuando necesitamos dinero de manera urgente, solemos acudir a opciones informales, una de las más conocidas son las tandas.
Sin embargo, aunque sean muy populares, podrían no ser la mejor opción tanto para tu bolsillo como para tu situación financiera.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de los Servicios Financieros (Condusef) en la revista Proteja su dinero, compartió algunos motivos
por las cuáles no es tan recomendable acudir a ellas y, por el contrario, las ventajas de solicitar un préstamo o crédito financiero en alguna institución financiera de manera formal:
si dejas tu dinero en una tanda, este se devaluará. Ante los altos niveles de inflación, lo mejor que puedes hacer es invertir tu dinero en algún instrumento que te dé rendimientos y desafortunadamente en una tanda, esto no pasará. Al final tu dinero valdrá menos, es decir: te alcanzará para comprar menos cosas
por muy buena amistad o relación que tengas con la persona que organiza la tanda, lo cierto es que puede ser que simplemente un día no recibas noticias de esa persona. Existen muchos casos en los que los organizadores son familiares y aun así al tener grandes cantidades de dinero en su posesión, desaparecen
tienes que esperar y confiar en que todas las personas que participan en la tanda cumplan con las fechas de entrega de cada “número de la tanda” y que el organizador pueda juntarla completa el día que te toca. Algunas veces los participantes se atrasan en pagar cada número
en caso de tener algún problema en una tanda, no hay ni existe actualmente ningún respaldo legal
Por su parte, en cuanto a los préstamos:
certidumbre financiera: la obtención de un crédito formal brinda, sobre cualquier otra cosa, certidumbre para las y los empresarios que lo apuestan todo en el día a día de su operación. No se pueden dar el lujo de caer en trampas o estafas, mucho menos en las problemáticas sociales que pueden venir con una tanda. El financiamiento formal hoy en día existe más allá de la banca tradicional y pueden obtener instrumentos más flexibles en instituciones del sector fintech o con plataformas sólidas. La clave está en encontrar productos y servicios reconocidos en la industriacrecimiento a largo plazo: de acuerdo con Alberto Bonetti, CEO y fundador de YoFío; un crédito es ideal para que un micronegocio vislumbre sus potenciales de crecimiento. A veces, solo se necesita un poco de liquidez para invertir en inventario o algunas mejoras mínimas a la empresa. Ese tipo de inyecciones de dinero pueden catapultar a un micronegocio al siguiente nivel y, particularmente, permitir una planeación a largo plazo más allá de la liquidez inmediata
historial crediticio en mente: el uso de tandas y de financiamientos informales puede ser práctico, pero poco abona al historial crediticio de un micronegocio
aunque parece una exquisitez, la realidad es que cualquier empresa debe construir y consolidar su historial para que pueda, eventualmente, acceder a instrumentos de inversión y de financiamiento mayores, en la medida que el negocio crezca
gestión financiera ordenada: acceder a un crédito formal ayuda a que un micronegocio lleve sus finanzas en orden. Para bien o para mal, este tipo de productos y servicios financieros requieren de la elaboración de presupuestos, así como de un seguimiento constante a gastos e ingresos